Redacción
Omar Chávez, alejado de las adicciones y enfocado en sus entrenamientos, se ha dado una oportunidad más para probar si su talento es aspirante a trascender en el boxeo profesional.
Y es que luego de dos descalabros en fila, y de tal vez mostrar una cara, contraria a lo que dicta la disciplina de este deporte, el hijo de Julio César Chávez González, púgil histórico, acepta que se la ha pensado en ya mejor colgar los guantes, aunque también está esa espina que lo motiva a intentarlo de nuevo.
“Sí lo he pensado (retiro), más que vengo de dos derrotas consecutivas; me gusta pelear, pero lógicamente tengo que hacerlo bien”, asegura.
Esta noche, en su regreso a los ensogados, el llamado Businessman será parte de la cartelera organizada por la empresa Bxstrs Promotions en Los Cabos, Baja California Sur, para medirse en 10 rounds a Daniel Vega, y su padre, el Gran Campeón Mexicano, estará una vez más en su esquina para darle el espaldarazo.