Redacción
Novak Djokovic quiere disputar el Abierto de Australia pero depende de él «resolver la situación» con el gobierno del país, dijo el miércoles el responsable del torneo, Craig Tiley.
La última edición de este Grand Slam quedó ensombrecida por una trifulca legal entre el gobierno y Djokovic que terminó con la deportación del tenista serbio por no estar vacunado contra el COVID-19.
Además, el nueve veces campeón del torneo recibió una prohibición de tres años de entrar al país, aunque esta puede ser revocada por el nuevo gobierno de centro-izquierda que, de momento, no se ha pronunciado al respecto.
Tiley dijo que había hablado recientemente con Djokovic y que este quiere volver a disputar el primer Grand Slam del año, el próximo enero en Melbourne.
«Dijo que, obviamente, le encantaría volver a Australia, pero sabe que en última instancia será una decisión del gobierno», explicó el director del torneo al periódico The Age. «Lo que decimos ahora es que Novak y el gobierno federal tienen que resolver la situación», añadió.