Redacción
El receptor Rashee Rice, acusado de ocho cargos por delitos graves provocados en un accidente automovilístico en marzo pasado, ahora es investigado por golpear a un fotógrafo en un club nocturno, informó este martes la policía de la ciudad estadounidense de Dallas.
El Departamento de Policía ha contactado con varios testigos del incidente ocurrido la madrugada del lunes en un club nocturno de Dallas. Es el segundo incidente en este año en el que se ve involucrado el receptor del equipo campeón de la NFL, Kansas City Chiefs.
Rice, de 23 años, provocó un accidente automovilístico el 30 de marzo pasado en el que resultaron lesionadas cuatro personas. El receptor conducía un Lamborghini a alta velocidad contra un Corvette, ambos autos colisionaron e involucraron a otros cuatro vehículos.
El jugador abandonó la escena sin prestar atención a los afectados. El 10 de abril el Departamento de Policía de Dallas emitió una orden de arresto contra el jugador por ocho cargos graves: seis de colisión con lesiones corporales, uno de agresión agravada y uno más por colisión que involucra lesiones corporales graves.
Rashee se entregó 24 horas después, pagó una fianza de 40.000 dólares, 5.000 por cada uno de los ocho cargos presentados en su contra. Una semana después el receptor fue demandado por un millón de dólares por dos de las personas que salieron lesionadas en el accidente.
El lunes 15 de abril, con la investigación en curso, el entrenador de los Chiefs, Andy Reid, dijo que Rice no participaría en los entrenamientos de equipo de manera presencial, sólo recibiría instrucciones de manera virtual.
Un día después de lo dicho por su coach, el receptor compartió a través de su cuenta de Instagram vídeos en los que se le veía realizar algunas trayectorias para atrapar pases de Patrick Mahomes, quarterback de Kansas City, en las instalaciones de una escuela secundaria en el área de Dallas-Fort Worth.
Con dos investigaciones en curso Rashee Rice se expone a un castigo de la NFL por violar su Política de Conducta Personal. El 25 de abril, Roger Goodell, comisionado de la NFL, afirmó que la liga actuaría en cuanto termine el proceso legal.
«Seguimos de cerca el proceso y tan pronto como termine estaremos preparados para tomar una decisión de acuerdo a la Política de Conducta de Personal que tenemos», subrayó Goodell.
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