
Redacción
Un entrenamiento muy diferente al resto. Rafael Nadal, 14 veces ganador de Roland Garros y cuya participación no está confirmada a seis días del comienzo del torneo, saltó a la cancha Philippe Chatrier este lunes para su primera sesión en París, con miles de personas entusiasmadas en las gradas.
Nadal no había pisado la tierra batida parisina desde su triunfo en la edición de 2022 ante Casper Ruud, cuando fue capaz de levantar el trofeo a pesar de varios problemas físicos, entre ellos un pie izquierdo anestesiado para calmar los dolores por el mal crónico que sufre desde que tiene 18 años (síndrome de Müller-Weiss).
El ganador de 22 torneos de Grand Slam saltó a la central para entrenarse aclamado por unas 6,000 personas que habían acudido al recinto para seguir el primer día de la fase previa en las otras pistas. Cinco minutos antes de la hora anunciada de su entrenamiento, los ‘Rafa, Rafa, Rafa’ se escuchaban en la Chatrier, teatro de sus 14 coronas.
Nadal, a punto de cumplir los 38 años de edad, no ha conseguido recuperar el nivel tras destinar 2023 a regenerar su físico, lastrado por las lesiones. En las últimas semanas disputó los Octavos en Madrid y cayó en segunda ronda en Roma.
En sus mensajes a los medios ha insistido en que no competirá en Roland Garros si no se considera preparado. El cuadro principal del torneo arranca el domingo y el sorteo se celebra el jueves, por lo que su decisión ya es casi inminente.
Quizás le ayude el fervor popular que se ha creado sobre su más que probable última presencia en el certamen, con un ambiente espectacular este lunes bajo el techo retráctil de la central (llovía en la capital francesa) y el guiño del presentador cuando entró en la pista: ‘Un español bastante conocido aquí en París’.
¿Cómo fue el entrenamiento de Rafa Nadal?
En los primeros minutos cada uno de sus golpes fue acompañado del clamor del público. En una esquina de la pista, la directora del torneo Amelie Mauresmo y el entrenador del español, el antiguo número 1 mundial Carlos Moyá.
Nadal compartió entrenamiento con su técnico Marc López, antiguo tenista con el que ganó el oro en dobles en Rio 2016, y un ‘sparring’ francés, Vivien Cobos. Se ejercitó durante una hora y 45 minutos, algo más de lo previsto, finalizando antes de las 19:00 horas locales.
La leyenda ibérica imprimió más intensidad a partir de la primera hora, dedicando tiempo también al servicio, sin las precauciones que mostró en Madrid a finales de abril.