Redacción
Los toros de la legendaria ganadería de Miura se encargaron de cerrar con broche de oro los encierros de la Feria de San Fermín, a lo largo de una carrera peligrosa y llena de tensión que se hizo en un tiempo de dos minutos y 22 segundos, y en la que hubo muchos resbalones y caídas.
El momento de mayor riesgo lo vivió un corredor que fue levantado en vilo junto a una valla, pero sin sufrir daños de consideración, y siete heridos fueron trasladados al hospital pero ninguno por asta de toro.
A las ocho en punto, desde el corral de Santo Domingo, los toros de Miura salieron al abrirse las puertas y escuchar el cohetón, y desde ese momento la manada se estiró, prácticamente en una fila india, a la par que abrían brecha entre los numerosos mozos que corrían a sus costados.
El encierro corrió a un ritmo sostenido y en la salida de la calle Mercaderes se suscitó el mayor riesgo, pues uno de los toros volteó al corredor del que se hacía mención líneas arriba. En la curva de la calle Estafeta varios mozos fueron arrollados cuando los toros giraron hacia la derecha para continuar con su carrera.
Las vistosas carreras protagonizadas por varios mozos tuvieron lugar en esta etapa del recorrido, ya que la manada seguía estirada y fue acompañada a ambos lados, sin que dejara de haber caídas debido a la gran cantidad de corredores que quisieron despedir los sanfermines 2024 delante de los miuras.
La última parte del recorrido fue más intensa porque hubo muchas caídas y connatos de amontonamiento, pero que se deshicieron rápidamente, segundos antes de que uno de los toros se quedara un tanto rezagado y generó momentos de mucha tensión cuando irrumpió en el ruedo y antes de dirigirse hacia los corrales e la plaza.
Los toros de Miura que corrieron hoy en Pamplona se llaman «Tahonero», «Dobladores», «Estornino», «Chirrino», «Pandereto» y «Palmiteño», y serán estoqueados por Antonio Ferrera, Manuel Escribano y el venezolano Jesús Enrique Colombo. En cuanto a presencia y peso, el encierro es muy desigual, ya que existe una diferencia de casi 100 kilos entre uno que pesó 555 kilos y otro, el de mayor romana, de 650 kilos.
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