Redacción
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No hay mejor manera de empezar la temporada en la Premier League que con un título. Liverpool conquistó la Community Shield a ritmo de 3-1 ante el Manchester City de Pep Guardiola, que ni con Haaland pudieron contra los aguerridos Reds en el King Power Stadium.
El gol de Alexander-Arnold fue un poema al buen toque cuando los jugadores Reds llevaron el esférico de la banda izquierda a la derecha y terminó con un pase de Salah a su compañero que le pegó de primera intención al balón para ponerlo en el poste y conseguir el golazo del 1-0.
Al 65’ Darwin Núñez tuvo un mano a mano ante el arquero Ederson Moraes, pero su definición fue directo al rostro del portero y nomás no llegaba el gol del uruguayo que había entrado de cambio en el segundo tiempo.
La polémica
Sobre el minuto 70 llegó la jugada más polémica de la noche en Inglaterra luego de un gol anulado a Julián Álvarez que había conseguido meter el esférico tras una aguerrida batalla de Phil Foden, que primero remató a gol, pero el arquero desvió, y luego luchó el balón para dejarlo en el área chica para Álvarez que anotó con todo y dos defensas encima.
Originalmente el árbitro había anulado el gol por un supuesto fuera de lugar, pero luego de revisarse la jugada se dio por bueno para el 1-1.
El cierre del Liverpool
Cuando parecía que el partido podía terminar en empate, llegó un penal (que también fue marcado gracias al VAR) luego de un remate de cabeza de Darwin Núñez que dio en la mano de Ruben Dias, quien reclamó alegando que no había intención, pero no se lo perdonaron.
Así que llegó el cobro de Salah para pegarle al balón con potencia, abajo y a pegado al poste izquierdo del portero para devolver la ventaja a los Reds en un partido que resultó trepidante entre dos gigantes del futbol mundial.
Por fin llegó el gol de Darwin Núñez sobre el tiempo de compensación luego de un centro de Salah para Robertson, quien de cabeza bajó el balón para el uruguayo, quien de palomita conectó ante la salida del arquero para lograr el 3-1 que aseguró la copa.
Así fue como el Liverpool volvió a conquistar este trofeo 15 ediciones después, ahora bajo la tutela de Jürgen Klopp.
