
El joven ciclista mexicano Isaac del Toro se consagra como una de las grandes promesas del ciclismo mundial al convertirse en el primer mexicano en alzar el título de la Vuelta a Burgos, logrando una victoria épica que quedará marcada en la historia.
Con apenas 21 años, del Toro demostró su calidad y determinación, pese a enfrentar obstáculos importantes: sufrió una caída en la primera etapa y, en la última jornada, tuvo que lidiar con un pinchazo a solo 14 kilómetros de la meta.
Sin embargo, gracias a una estrategia brillante y un esfuerzo constante, logró superar las adversidades y cruzar la línea de llegada con una ventaja de 19 segundos sobre su rival Lorenzo Fortunato, sumando un triunfo más a una carrera llena de éxitos.