Redacción
Muchas veces pasa en la NBA que las franquicias más débiles cuentan con una figura que destaca de sobremanera del resto y, aunque en lo deportivo es un paso en falso, porque las victorias no aparecen, pensando en el futuro puede tener sus beneficios por todas las franquicias que posan sus ojos sobre estas joyas.
En el caso específico de Brooklyn Nets, tras un año muy complicado, uno de los que más brilló fue Cam Thomas, el joven base que atraviesa un momento difícil de su carrera.
Cam Thomas: a la deriva y sin opciones
Tiene apenas 23 años, pero ya demostró tener lo necesario para liderar a un equipo o ser un acompañante principal de la orquesta, por lo que se esperaba que, tras una campaña 2024-25 en la que promedió 24 puntos, 3.3 rebotes y 3.8 asistencias en apenas los 25 partidos que pudo estar sobre la duela producto de múltiples lesiones, pudiera dar un salto importante en su trayectoria.
Thomas es parte de la liga desde el año 2021 y desde entonces ha demostrado su valía. Uno de los mejores momentos de su carrera llegó en 2023, cuando anotó de manera consecutiva 44 y 47 puntos ante Washington Wizards y Los Angeles Clippers, respectivamente.
Este logro le permitió colocarse junto a LeBron James como el jugador más joven en sumar 44 unidades o más en partidos distintos continuados. “Es una gran compañía. Aunque yo soy de Kobe (Bryant), así que si hubieras dicho Kobe me habría emocionado un poco más”, expresó Thomas en su momento.
Actualmente, a pesar de que hay una gran expectativa por lo que puede realizar Thomas en la próxima campaña, lo cierto es que el futuro del jugador es una incógnita. Brooklyn le ofreció una extensión contractual de dos años y 28 millones de dólares, pero Cam está deseando dar un salto en su carrera y buscar otros horizontes, más competitivos y mucho más suculentos en el aspecto económico.
La mala noticia para él es que no hay equipos importantes listos para ofrecerle lo que espera. Las franquicias soñadas para él no llamaron para consultar por sus servicios, por lo que todo indica que tendrá que conformarse y resignarse a aceptar lo que los Nets le quieren pagar, antes de tirar un año a la basura por no obtener lo imaginado.
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