Redacción
Lo tenía muy difícil. Casi imposible. Sabía que McLaren era el coche más rápido en Abu Dhabi, en el último Gran Premio de la temporada, y partía con 12 puntos de desventaja y peor monoplaza. Pero Max Verstappen nunca da su brazo a torcer. Y si logra dar con la tecla de los reglajes de su coche, siempre está a tiempo de sacar su varita y hacer magia. Volvió a hacerlo con una pole descomunal que parecía muy lejana hace tan solo un día.
Max, piloto total, siempre al ataque, con las mejores manos de la parrilla y quizás de toda la historia, voló hacia lo impensable este sábado en una clasificación crucial. Si cualquiera de los tres aspirantes al título fallaba, prácticamente se podía despedir de sus opciones. La tensión era enorme. Los nervios estaban a flor de piel. Y todos eran muy conscientes de que entre muros, cualquier accidente en el momento más inoportuno, podía dejarle en una muy mala posición de parrilla. Pero nada ajeno se entrometió en el camino de los aspirantes. Y ahí, a velocidad pura a una vuelta, a Max no le tembló el pulso.
El actual campeón de F1 ya dijo que, por sus pocas opciones (consulta las combinaciones de título para Norris, Piastri y Verstappen), no pensaba en el título y no le cambiaba nada tener uno más en casa tras disponer de 4 ya en su salón. Solo quería divertirse. Y para más, la sonrisa es sinónimo de velocidad.
Quizás no logre este título, pero va a lucharlo hasta el último metro, ejerciendo presión al líder del Mundial, Lando Norris, hasta que quede un mínimo de esperanzas. Y lo volvió a demostrar con una pole estratosférica en Abu Dhabi, en la que fue clave su compañero Yuki Tsunoda al meterse en Q3 y ayudarle con dos rebufos en sus dos vueltas, que explica que Yuki sea 10º sin marcar un tiempo, pero con el trabajo más que hecho.
Max Verstappen arrancará primero ante su máximo oponente y líder de la clasificación del Mundial de F1, Lando Norris, que arrancará 2º, ambos separados por 12 puntos. Y el tercer contendiente, Piastri, arrancará 3º. Los tres pilotos que se juegan el título, en las tres primeras posiciones. Pudo ser mucho peor para Lando, que en Q1 era 6º y en Q2, 3º. Y en el primer intento de Q3, era 3º por detrás de Piastri. Pudo rendir en el momento clave para por lo menos para minimizar daños y no tener que sufrir tanto al poder lograr ese 2º puesto, que puede ser crucial para dejarlo en una buena posición en la lucha por el título de F1. Eso pero, dependerá de una salida que puede ser la más tensa de los últimos años.
El morbo en ese arranque es enorme. Primero, porque habrá que ver si Max utiliza su astucia para intentar que Lando pierda algún puesto. ¿Irá Verstappen a cerrar a Norris para que alguien le supere o confiará en lo que puedan hacer Piastri y Russell?
Y es que la otra parte del morbo está en esa tercera plaza. Piastri sigue teniendo opciones de coronarse. Esas pasan por atacar y atacar. Desde la salida. Deberá ir a por su compañero, pese a que en McLaren puedan pensar en todo lo contrario. El muro ‘Papaya’ puede temblar en el arranque. ¿Habrá órdenes de equipo para que Oscar no adelante a Lando? Si eso pasa, el inglés estaría a solo una posición de perder el título, contra las cuerdas, al borde del abismo ante un Russell que quiere un último podio para despedir su año.
El australiano suele salir mejor que Norris. ¿Atacará con todo? ¿Arriesgará a tocarse con Lando? Y detrás, Russell podría convertirse en juez en esta lucha. George es 4º y podría no querer meterse en líos. O quizás busque ese podio, tan solo pensando en su carrera, como ya avisó el jueves, por muy británico que sea como Lando.
Recordemos: Norris necesita ser por lo menos 3º si Max gana para ser campeón. Pero en Abu Dhabi, con las altas probabilidades de coche de seguridad y tal y como está la parrilla de salida, nada se puede dar por descontado.
Este domingo puede ocurrir de todo. Desde un final épico y una carrera alocada, a una cita sin grandes sobresaltos.
