Redaccíón
Los Pittsburgh Steelers continúan demostrando su capacidad para contener a Lamar Jackson, el dinámico quarterback de los Baltimore Ravens. Sin una fórmula mágica, pero con disciplina y un sólido planteamiento defensivo, Pittsburgh se llevó una ajustada victoria de 18-16 en un partido que destacó por la eficacia de su defensa.
A pesar de que Baltimore lidera la NFL en ofensiva, los Steelers (8-2) lograron limitar a Jackson y compañía a sus mínimos de la temporada en puntos y yardas totales (329), además de forzar tres pérdidas de balón que resultaron en goles de campo del infalible Chris Boswell.
Lamar Jackson, dos veces MVP, completó 16 de 33 pases para 207 yardas, un touchdown y una intercepción, pero su récord frente a Pittsburgh cayó a 1-4. Su único pase de anotación, conectado con Zay Flowers en los minutos finales, no fue suficiente, ya que la conversión de dos puntos falló tras un caótico intento de pase incompleto.
El enfrentamiento mostró el dominio estratégico de los Steelers en esta rivalidad. El linebacker novato Payton Wilson destacó al robar un balón clave a Justice Hill en el último cuarto, mientras los exjugadores de los Ravens, Patrick Queen y DeShon Elliott, se lucieron. Elliott recuperó un balón suelto de Derrick Henry en el primer cuarto, y Queen forzó y recuperó otro fumble de su antiguo compañero Isaiah Likely, asegurando una ventaja de 9-7 al medio tiempo que Pittsburgh nunca dejó escapar.
Con esta victoria, los Steelers lograron su octavo triunfo en los últimos nueve encuentros contra los Ravens, mostrando una vez más por qué son uno de los equipos mejor preparados para enfrentar a Jackson. Además, Pittsburgh ganó por segunda ocasión en la temporada sin anotar touchdowns, gracias a la precisión de Boswell, quien también anotó seis goles de campo en el partido inaugural de la temporada.