Cinco semanas después de una dolorosa derrota en Roland Garros, Jannik Sinner dio un golpe de autoridad en el césped de Wimbledon al vencer a Carlos Alcaraz por 4-6, 6-4, 6-4 y 6-4, conquistando así su primer título en el All England Club y cuarto Grand Slam en total. El italiano de 23 años se convirtió además en el primer jugador de su país en ganar Wimbledon en la categoría individual.
El número 1 del mundo mostró solidez mental y una ejecución impecable para frenar al español, quien llegaba con una racha de 24 victorias consecutivas y buscaba su sexto major. La victoria no solo representa una revancha directa tras la épica caída en París —donde Sinner tuvo tres puntos de campeonato—, sino también un punto de inflexión en la rivalidad más prometedora del tenis actual.
“Sufrí una derrota muy dura en París, pero trabajamos para entender lo que hicimos mal. Tener este trofeo aquí significa mucho”, expresó Sinner emocionado, rodeado de su familia y equipo.
Alcaraz, por su parte, reconoció el mérito de su rival:
“Es difícil perder, pero felicidades a Jannik. Te lo mereces. Estoy feliz de construir contigo no solo una gran rivalidad en la cancha, sino también una buena relación fuera de ella”.
Sinner se despide de Londres con una ventaja de 3430 puntos en el ranking ATP y con el control momentáneo de una rivalidad que define a la nueva generación del tenis.
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