Redacción
Paul George disputó por fin su primer partido del curso, y lo hizo en un escenario cargado de simbolismo: frente a sus ex Los Angeles Clippers, en un duelo que terminó con victoria ajustada para los Philadelphia 76ers por 110-108.
Este encuentro supone el primer partido oficial desde el 5 de marzo de 2025, tras un periodo marcado por los múltiples problemas físicos y una operación en la rodilla izquierda el pasado mes de julio.
El alero jugó 21 minutos en su regreso, firmando una actuación completa, con 9 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias y 2 tapones, aunque un con un discreto 2 de 9 en tiros de campo. Pese a la evidente falta de ritmo, George dejó destellos de su calidad ofensiva y defensiva.
Tras el partido, el jugador estadounidense reconoció en declaraciones para ESPN que había sido un momento especial. «La verdad es que me he sentido genial, afirmó. «Llevaba como ocho meses sin jugar, ha sido un largo camino con muchos altibajos, y muchos contratiempos». Pero ha sido genial volver. «Me he sentido muy bien. Oxidado, pero bien».
La primera temporada de George en Philadelphia había sido decepcionante, tanto para el jugador como para el equipo. Los 76ers, aspirantes al título, quedaron fuera demasiado pronto, y el propio alero no mostró su mejor nivel, en 41 partidos a las órdenes de Nick Nurse, promedió 16,2 puntos y 5,3 rebotes en 32,5 minutos por partido.
Aun así, el debut dejó un momento emocional para George. Tras anotar su primera canasta después de tantos meses, no pudo evitar reflejar su satisfacción. «Ha sido genial, tío», confesó en las declaraciones post partido. «He sentido muchas emociones con todo esto, intentaba mantenerme concentrado en el partido, pero sin duda fue genial anotar ese primer tiro».
