
El mundo del rock está de luto: Ozzy Osbourne, leyenda del heavy metal y voz emblemática de Black Sabbath, falleció este martes a los 76 años. Su partida deja un vacío inmenso no solo en la música, sino también en el fútbol inglés, donde su nombre siempre estará ligado al Aston Villa, club del cual fue hincha toda su vida.
La devoción del cantante por el equipo de Birmingham se mantuvo hasta sus últimos días. Durante la temporada 2024/25, Osbourne participó en una campaña publicitaria del club en la que se utilizó “Paranoid”, uno de los clásicos de Black Sabbath, como banda sonora. Su presencia no solo fue simbólica, sino emocional para la afición villana.
El vínculo entre Osbourne y el Aston Villa se celebró de manera emotiva en el Villa Park, donde, durante el duelo ante el Celtic de Glasgow por la jornada 8 de la UEFA Champions League, los seguidores desplegaron un enorme tifo con su rostro y el lema “Up the Villa”. Un homenaje sincero a un hincha eterno.
En octubre de 2024, el club presentó una camiseta conmemorativa de edición limitada con la inscripción “Black Sabbath” en la parte trasera, rindiendo homenaje tanto a la banda pionera del heavy metal como a su conexión con Birmingham. En esa ocasión, Ozzy recibió el dorsal número 9, el mismo que portaba el delantero Jhon Jader Durán, quien usó la prenda especial durante un partido frente al Crystal Palace por la Carabao Cup.
“Back to the Beginning”: el concierto final en casa
El último gran acto de Ozzy fue justamente en casa. El 5 de julio de 2025, el Villa Park fue sede de “Back to the Beginning” (De vuelta al inicio), el último concierto de Black Sabbath con Ozzy al frente. Fue una jornada histórica en la que compartieron escenario bandas como Metallica, Guns N’ Roses, Slayer, Tool, Gojira y Pantera.
El evento recaudó más de 200 millones de dólares destinados a causas benéficas, convirtiéndose en uno de los conciertos con fines solidarios más lucrativos de la historia. Vía streaming, más de 5.8 millones de personas lo siguieron en directo, estableciendo un nuevo récord de visualización.
Ozzy Osbourne se va como vivió: ruidoso, intenso, provocador y amado por millones. Su legado musical es eterno, pero también lo es el cariño de quienes, más allá del metal, lo vieron como uno de los suyos en las gradas del Villa Park.