Redacción
Ni con la renovación que tuvo se terminaron los rumores sobre el futuro de Sergio Pérez en Red Bull y en gran parte es por sus actuaciones en lo que va de la temporada 2024 de la Fórmula 1. Ahora fue el turno de Christian Horner, jefe de la escudería, de lanzarle una advertencia de cara a la siguiente campaña.
Incluso el propio Checo Pérez reveló recientemente que los problemas que está teniendo este año y la presión que hay sobre él, hicieron que pensara en retirarse a finales de temporada, aunque después decidió no rendirse y tratar de darle vuelta.
El que reemplazaron en Red Bull fue Daniel Ricciardo, quien dejó su asiento en Racing Bulls para que lo reemplace el joven Liam Lawson, pero su chance en el equipo de las bebidas energéticas no ha desaparecido.
El propio Horner habló en el Podcast F1 Nation advirtiendo que si no hay cambios en el rendimiento de Checo Pérez en lo que resta de la temporada podría haber una nueva alineación para 2025, donde podría entrar otro regreso de Ricciardo.
“Hemos dejado muy claro que queremos que permanezca en el equipo como embajador. Además, nunca se sabe con certeza qué sucederá. Si Liam no hace el trabajo o si Checo no hace el trabajo, entonces sabemos qué puede hacer Daniel”.
Y fue contundente en decir que quieren que Pérez tenga el nivel que mostró a inicios de la temporada. “Por supuesto, nada cambiará si Checo recupera la forma que tenía a principios de año. Pero como sabemos, dos semanas es mucho tiempo en este deporte”.
¿Por qué Ricciardo no reemplazó a Checo Pérez?
Horner también fue claro sobre el por qué Daniel Ricciardo nunca tomó el lugar de Checo Pérez pese a sus malas actuaciones, donde comentó que el australiano nunca hizo lo suficiente para escalar a Red Bull pese a las chances que le dieron.
“He hecho todo lo posible por darle el máximo tiempo en el coche para que pudiera rendir. De lo contrario, se habría bajado del coche después de Barcelona. Todos los pilotos están bajo presión para rendir, pero la razón por la que Daniel estaba en ese coche era para volver a estar en una posición en la que, en última instancia, estuviera allí para tomar la oportunidad si Checo no rendía”.
“El problema fue que ambos tuvieron problemas de forma en distintos momentos. Checo empezó la temporada muy bien, muy fuerte, y Daniel tenía problemas. Y luego, obviamente, cuando Checo perdió la forma, Daniel la recuperó un poco. Pero nunca fue lo suficientemente convincente como para decir: ‘vale, deberíamos cambiar a los dos pilotos’”.