Redacción
La selección mexicana ha vuelto a generar dudas en su funcionamiento, con todo y Julián Quiñones en el terreno de juego, pues la visita ante Honduras fue dura para un equipo de Jaime Lozano que no se encontró en el terreno de juego.
El combinado azteca sufrió la baja de su capitán y arquero titular, Guillermo Ochoa, que no pudo seguir debido a una lesión en el hombro tras un choque con un rival catracho.
Al 29, y con Malagón en el marco tricolor, los hondureños se fueron al frente con Anthony Lozano que aprovechó un brillante servicio al área para abrir el marcador a favor de los locales, dejando muy mal en el papel a la defensa mexicana.
Pero los centroamericanos, que fueron muy superiores en todo el juego, y buscaron ir más adelante con el 2-0, al minuto 71, producto de un golazo de Bryan Róchez que se lució dentro del área con una gran vuelta y definiendo ante el portero americanista.
Julián Quiñones ingresó al campo con el marcador definido para los hondureños y no se le vio en algún momento la capacidad de mover el partido, con la obligación ahora de México de ganar por 3 goles en el Azteca y que los catrachos no anoten, pues el gol de visitante complicaría la calificación a la Copa América de los mexicanos.
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