Redacción
Miguel Layún es un futbolista mexicano que logró hacer una buena carrera en México y en Europa, que probó suerte en el Viejo Continente desde temprana edad y recientemente reveló los sacrificios económicos que tuvo que hacer para cumplir su sueño de irse al futbol europeo en una charla que tuvo en Capitán Financiero.
El ahora exjugador primero probó suerte en el Atalanta en 2009, cuando recién comenzaba su carrera, donde duró un año y volvió a la Liga MX con América, volviéndose un referente y que lo catapultó al Watford, aunque tuvo la opción de quedarse y cobrar mucho dinero, pero prefirió irse a Inglaterra.
“La primera no, jugaba en Veracruz y no cobraba tanto. Ahí me mejoraron el salario, pero después, cuando me voy a Watford, ahí sí tomé una decisión importante porque me vencía el contrato a los seis meses y llegó la gente del club (América) para que me quedara y ya en las últimas negociaciones me dijeron cuánto quieres ganar, pon un número, pero no se trata de eso, quería cumplir mi sueño, quería ver si podía competir en el futbol europeo y después me gusta ver la fotografía completa, si la veo de cerca me hubiera quedado con cobrar más dinero y ser referente en América”.
“ América es el equipo de mis amores, entonces no tienes una lógica para decir que no, pero cuando empiezo a ver todo lo que puede generar, le decía a mi esposa que quería crecer, saber si me podía medir y le dije que además que si me iba medianamente bien, vamos a poder regresar y cobrar mucho más dinero”.
Layún reveló en el podcast que en el Watford cobraba la mitad del sueldo que tenía en América y apenas le alcanzaba para pagar la renta de la casa y del automóvil que tuvo, ya que vivía en un pueblo caro, como es Saint Albans.
“Me fui cobrando la mitad de lo que ganaba en América en ese entonces, sin contar el aumento. Me fui a vivir a una ciudad sumamente cara, cuando pones Londres en el Google Maps, te sale un círculo que dice Londres. Ese círculo es la M25, que es una autopista que rodea todo Londres. Watford está dentro de esa autopista, pero vivíamos en un pueblo que se llama Saint Albans, que es donde está el campo de entrenamiento y vive mucha gente de dinero que trabaja en Londres, y la gente tiene un ingreso altísimo, por lo que es caro vivir en ese pueblo y se me iba el salario entre renta de casa y renta de coche y ahorrábamos muy poquito”.
¿Por qué Layún se fue al Watford ganando menos que en el América?
Sin embargo, recordó que parte de que no cobrara más dinero fue por las negociaciones que tuvo, ya que el equipo utilizó un papel de víctima para negociar por estar en la Segunda División inglesa, cuando sus compañeros cobraban mucho más que él, algo que le dio coraje.
“Cobran muy bien, pero a mí me fueron con la llorona los cabrones, como no conocía la Championship, me decían ‘no, Miguel, es Segunda División’ y de repente me siento y tenía compañeros cobrando siete veces más a la semana de lo que yo cobraba. Me pegó un coraje, yo todavía de buen corazón”.
Miguel también habló sobre el estilo de vida financiero que tienen los jugadores en Europa, donde comentó que si bien no hay una educación financiera por parte de los clubes, los futbolistas no andan tratando de impresionar usando ropa de marcas de lujo, como sí sucede mucho en México.
“La parte financiera no es algo que le interese a los equipos, y no sé hasta dónde viene en parte por nosotros. El jugador quiere entrenar, jugar el partido y vivir la vida, la neta. Es nuestro común denominador y no sé hasta qué momento somos los jugadores los que permean eso a los clubes, de no gastar. Pero sería una prestación importante. Nosotros tenemos un problema importante, venimos de una cultura consumista, nosotros consumimos a lo bestia. En España les da igual la marca, acá no, acá a huevo hay que andar con Balenciaga, Louis Vuitton, aunque me cueste lo que me cueste y si Juanito tiene un coche último modelo, pues yo también, porque voy a demostrar que también puedo”.
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