Redacción
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En una jugada estratégica, la Federación Mexicana de Futbol y la Federación de Futbol de Estados Unidos han presentado oficialmente su candidatura para ser las sedes de la esperada Copa Mundial Femenina de la FIFA 2027.
Esta alianza no solo pretende ser anfitriona de un torneo sin precedentes, sino que también busca elevar el futbol femenino a nuevas alturas.
«NEW HEIGHTS»: un modelo integral de colaboración
La visión detrás de la candidatura es clara: llevar la experiencia del torneo a nuevas dimensiones. Con la infraestructura necesaria ya en su lugar, incluyendo instalaciones de entrenamiento de primer nivel, sedes de partidos modernas, campamentos bien equipados y hoteles de alta categoría, la promesa de un torneo de calidad está en el aire.
La candidatura propone un modelo de asociación integral que une a ciudades anfitrionas, estadios, socios y la FIFA.
Esta estrategia tiene como objetivo maximizar los beneficios económicos para todos los involucrados y potenciar el futbol femenino.
La presidenta de U.S. Soccer, Cindy Parlow Cone, subraya la creciente inversión global en el futbol femenino. Estados Unidos y México, en una posición única, buscan organizar una Copa Mundial que no solo iguale las condiciones del torneo masculino del año anterior, sino que también impulse el potencial económico del futbol femenino.
Copa Mundial Masculina 2026 y su importancia para otras candidaturas
La candidatura tiene la vista puesta en las ventajas dejadas por la Copa Mundial Masculina de la FIFA 2026. Desde la infraestructura deportiva hasta los protocolos de seguridad, la organización conjunta de México y Estados Unidos está en una posición privilegiada para llevar la Copa Mundial Femenina a un nivel sin precedentes.
Las visitas de inspección de la FIFA están programadas para febrero de 2024, y la decisión final se tomará en el 74º Congreso de la FIFA en mayo de 2024. La Copa Mundial Femenina 2027 no solo será un torneo, sino un legado que elevará el futbol femenino a «NUEVAS ALTURAS».
La décima edición del torneo se perfila como una oportunidad única para México y Estados Unidos quien ha sido sede en dos ocasiones anteriores, en 1999 y 2003, y ahora, junto con México, buscan llevar el futbol femenino a niveles inéditos. r-el-torneo
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