Lionel Messi volvió a marcar la diferencia con un gol de antología y lideró la remontada del Inter Miami, que se impuso 2-1 al FC Porto en la segunda jornada del Grupo A del Mundial de Clubes, acercándose así a la clasificación a los octavos de final del certamen.
El encuentro, disputado en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, comenzó cuesta arriba para el conjunto estadounidense, que venía de empatar sin goles en su debut ante el Al Ahly de Egipto. La escuadra portuguesa se adelantó en el marcador por medio de Samu Aghehowa, quien transformó un penal en la primera mitad.
Sin embargo, tras el descanso, los dirigidos por Gerardo Martino mostraron una cara completamente distinta. El empate llegó a los 47 minutos gracias a una gran jugada colectiva que culminó con un potente remate del venezolano Telasco Segovia, quien apareció entre varios defensores lusos para enviar el balón al ángulo izquierdo.
La noche se iluminó aún más poco después, cuando Messi fue derribado al borde del área tras una conducción por el centro del campo. En medio del entusiasmo del público, el capitán argentino ejecutó un preciso disparo de tiro libre que dejó sin opciones al arquero Claudio Ramos, colocando el balón cerca del poste derecho y desatando la euforia en las gradas.
Porto intentó reaccionar en los minutos finales, pero sus ataques carecieron de claridad y se toparon con un ordenado esquema defensivo del conjunto de la MLS, que resistió con firmeza los embates rivales. El arquero Óscar Ustari tuvo intervenciones clave para mantener la ventaja.
Con esta victoria, Inter Miami alcanzó los cuatro puntos en el grupo, los mismos que Palmeiras, que más temprano superó 2-0 al Al Ahly. El cierre del grupo se jugará el próximo lunes, cuando el equipo estadounidense reciba al campeón brasileño en un duelo directo por el liderato y el pase a la siguiente fase.
El triunfo también marcó un hecho inédito en el torneo: por primera vez un equipo europeo cayó ante un rival de otra confederación en el Mundial de Clubes, consolidando así una jornada histórica para el fútbol de Estados Unidos y para Lionel Messi, quien continúa demostrando su vigencia a los 37 años.
