
Redacción
Gracias a una carrera de una docena de años –cinco de los cuales fueron con los Dallas Mavericks– el mexicano Eduardo Najera continúa destacándose entre sus compatriotas como una de las figuras más importantes en la historia del básquetbol del país. A finales del mes pasado, Nájera acompañó a los Mavs en Monterrey, sirviendo nuevamente como embajador, al debutar un par de canchas donadas por el equipo para la comunidad regia.
“Los Mavericks deberían ser el equipo de México”, dijo Nájera durante el evento. “Este fue mi sueño, cuando jugaba para los Mavericks, de hacer este tipo de evento en México. Queremos continuar el crecimiento del basquetbol, específicamente con los Dallas Maveicks en todo el país. Esperemos que este sea el primero [de estos eventos] de muchos a través de México”, continuó.
De acuerdo con la misma NBA, hay 32 millones de sus aficionados en México. La liga ha jugado 14 partidos de temporada regular en la Ciudad de México desde 1997, pero se han disputado también varios duelos de pretemporada en las últimas décadas – Monterrey ha sido sede de dos, en 2006 y 2009.
A una distancia de aproximadamente 860 kilómetros de Dallas, Monterrey históricamente ha sido una ciudad con afición extensa para las ligas con base en los Estados Unidos. Gracias a la cercanía relativa, los equipos del sur de Texas han logrado tener popularidad con la afición regia.
“Siempre hemos tenido muchos aficionados a los Mavs, y ahora habrá muchos más”, dijo Adrián Emilio de la Garza Santos, el presidente municipal de Monterrey durante el evento. “No es una inauguración cotidiana, nos ha tocado rehabilitar muchas canchas de la ciudad de Monterrey, pero esta reinauguración de esta cancha junto a los Dallas Mavericks es importantísimo”, continuó.
Previamente, los Mavericks habían dedicado canchas en Eslovenia y España. Además, han llevado a cabo eventos similares en el norte de Texas, un estado donde el más reciente censo calcula residen 11.4 millones de personas latinas. De esa cantidad, la gran mayoría son de origen o herencia mexicana, con 9.6 millones de personas contadas.
Por lo mismo, la dirigencia del equipo de los Mavericks, con Nájera como principal embajador, buscan ampliar su presencia en el país, para cumplir con el mandato de convertirse en el equipo más popular de México. Actualmente, los Mavericks se encuentran detrás de equipos como los Chicago Bulls, Los Angeles Lakers y Golden State Warriors, quienes se erigieron como las tres franquicias más seguidas en el país de acuerdo a una encuesta de 2018.
“Siempre he querido que los Mavericks hagan este tipo de eventos. Dicho esto, los nuevos dueños llegaron y obviamente entienden la importante del crecimiento del basquetbol”, dijo Nájera. “Es un deporte universal, y creo que están viendo la importancia del mercado mexicano”.
Aunque la dedicación de las canchas en Monterrey es el más reciente guiño del equipo de los Mavericks al público mexicano, definitivamente no ha sido el único. Durante la temporada actual, el equipo ha llevado a cabo diversos eventos en su arena diseñados para atraer y celebrar a la cultura mexicana.
El 31 de octubre, el equipo festejó el Día de los Muertos en el American Airlines Center, instando a sus aficionados a celebrar la efeméride junto a Halloween con actividades previas al partido que disputaron ante los Houston Rockets. Ya en marzo, el equipo celebró la noche de Los Mavs, como parte de las festividades de Noches Ene-bé-a, una iniciativa a lo largo de la NBA diseñada para los fans de origen latino.
Previamente, el equipo sostiene una historia estrecha con México. El 7 de diciembre de 1997, los Mavericks se enfrentaron a los Rockets en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México, en lo que fue el primer partido de temporada regular celebrado en México. Volvieron en 2017 y 2019, con duelos ante los Phoenix Suns y Detroit Pistons, respectivamente. Ambos duelos se jugaron en la Arena Ciudad de México.
Durante el evento en Monterrey, decenas de niños se dieron cita sobre las canchas, mismas que poseen alusiones gráficas a la cultura mexicana y, específicamente, a la ciudad de Monterrey. Ahí, se unieron a Nájera y Rolando Blackman, ex figura de los Mavericks nacido en Panamá, quien fue elegido cuatro veces al Juego de las Estrellas y cuyo número 22 fue retirado por la franquicia.
“Ahora los niños tienen esta cancha, y es muy importante que la comunidad continúe arropándolos, para que sigan creciendo”, dijo Blackman. “Yo tuve esta oportunidad, la gente se preocupó por mí. Y cuando eso ocurre, puedes crecer”, continuó.
La dedicación de las canchas por parte de los Mavericks llega en un momento clave para lo que ha sido un crecimiento estable para la NBA en México. Además de los partidos de temporada regular que se han disputado de forma seguida durante la última década, existe también la inversión de la liga en otorgarle una franquicia de G League – la liga de desarrollo de la NBA – a la Ciudad de México con los Capitanes.
La presencia de jugadores mexicoamericanos en la NBA durante las últimas temporadas, como Juan Toscano-Anderson, campeón de la liga con los Golden State Warriors, y Jaime Jaquez Jr., jugador actual del Miami Heat, han mantenido viva y cada vez más fuerte la llama de la liga con el consumidor mexicano.
En 2026, este interés podría llegar inclusive a otro nivel, con lo que sería el primer jugador mexicano desde Nájera en ser seleccionado por un equipo en el NBA Draft: el sonorense Karim Lopez. López, actualmente jugando para los New Zealand Breakers en la NBL, la liga australiana de basquetbol, proyecta a ser selección de primera ronda el año que entra – algo que superaría a Nájera, quien fue elegido en la segunda ronda del Draft del año 2000.
Cualquiera que sea el equipo que adquiera a López en 2026 tendrá camino libre a hacerse instantáneamente uno de los equipos más populares de la NBA en el país, por lo que el trabajo de Dallas en la comunidad de Monterrey y el resto del país es inclusive más notable para servir la misión de convertirse en el equipo más querido de México.