Redacción
Foto| Especial
Camiones de bomberos coronaron con chorros de agua el avión que lo trajo, entre gritos de sus fanáticos. Este viernes, Victor Wembanyama descendió de la nave y puso sus sandalias talla 55 en San Antonio, tierra sagrada de los Spurs.
Con sus 2.24 metros de altura, el prodigio francés de 19 años descendió del jet privado que lo trajo luego de que el jueves, en Nueva York, el cuadro de las espuelas plateadas tuvo ocasión de elegirlo primero, tras ganar la lotería del Draft de la NBA 2023.
En los exteriores del Signature North Terminal, decenas de fanáticos lo esperaban bajo una sensación térmica que superaba los 40ºC en Texas, tan calurosa como la bienvenida entre gritos de ‘Wemby, Wemby, Wemby’, que se oían desde el enrejado que protege la pista de aterrizaje.
‘Wemby es un maldito Spur’ o ‘Wemby, mi hija está soltera, cásate con ella’, eran algunos de los mensajes en los distintos carteles que los ciudadanos de San Antonio llevaron hasta la terminal aérea, en lo que se ha denominado como una ‘Wembymanía’.
Los fanáticos estaban equipados con sombrillas, hieleras y sillas, además de fotos con el rostro del jugador y banderas del club.
Apenas descendió del avión, el francés (la selección número 1 más codiciada para ingresar a la NBA desde que LeBron James fue elegido primero en 2003) optó primero por acercarse a sus fanáticos, que ya lo amaban sin conocerlo.
Wembanyama firmó camisetas, gorras, autógrafos y se dio el tiempo de fotografiarse con la policía motorizada, que luego lo escoltó en su ruta hacia la ciudad.