
Redacción
En los rodajes se cruzan muchas vidas. La crónica reciente del cine ha dejado amistades tan improbables como entrañables, al igual que enemistades. Ahí tenemos a Josh Hartnett contra Harrison Ford o la pelea entre Lucy Liu y Bill Murray, por ejemplo.
Esta vez, vamos con una historia de buen rollo porque lo que comenzó como una colaboración profesional se ha transformado, sin previo aviso, en una especie de vínculo peculiar que ha atravesado edades, estilos y orígenes. Eso parece haber ocurrido con Jamie Lee Curtis y Ana de Armas, dos actrices separadas por décadas de carrera y experiencia, pero que gracias a compartir cartel en ‘Puñales por la espalda’ han creado una conexión más allá del set que ha dejado huella.
En aquella comedia negra dirigida por Rian Johnson, Curtis interpretaba a una matriarca adinerada y altiva, mientras que Ana de Armas se metía en la piel de Marta, la enfermera inmigrante que termina en el centro de la trama. Fue entonces cuando Jamie Lee, que debutó en el cine en 1978 de la mano de John Carpenter con ‘La noche de Halloween’, una de las mejores películas de terror de la historia del cine, conoció a Ana, cubana de nacimiento y ya asentada en Hollywood, aunque todavía lejos del estrellato que estaba a punto de alcanzar.
En una entrevista para la revista ‘Elle’, Curtis reconocía con una honestidad poco habitual que su primera impresión fue equivocada: «Supuse, y lo digo con auténtica vergüenza, pero, como venía de Cuba, creía que era una joven poco sofisticada e inexperta porque acababa de llegar. Aquel primer día le pregunté: ‘¿Cuáles son tus sueños?'», comentaba Curtis.
La historia no se queda ahí. Curtis quedó tan impresionada por el talento de Ana de Armas que quiso presentarla a Steven Spielberg para el papel de María en West Side Story, o incluso a sus ahijados, Maggie y Jake Gyllenhaal. La sorpresa fue suya cuando Ana le dijo que ya conocía a Jake. Y es que la joven actriz cubana, que había dado el salto al inglés con ‘Toc Toc’ junto a Keanu Reeves, ya se movía con soltura por los pasillos del cine estadounidense.
Curtis lo explica con cariño y también con un matiz revelador: «No es tan sofisticada como quizás las campañas publicitarias quieren hacernos creer. Se implica, se interesa, es curiosa y hace muchas preguntas», asegura la veterana actriz.
Desde aquel rodaje, ambas han seguido caminos distintos pero igual de activos. Ana de Armas protagonizó ‘Blonde’ en 2022, donde encarnó a Marilyn Monroe con una interpretación que dividió a la crítica pero la consolidó como actriz. Más recientemente, ha protagonizado ‘Ballerina’, un spin-off del universo John Wick. La película ha tenido una acogida más que notable, siendo una de las mejores películas de acción de 2025.
Por su parte, Jamie Lee Curtis ha mantenido una trayectoria no menos intensa. Tras ganar el Óscar en 2023 por su papel en ‘Todo a la vez en todas partes’, ha seguido explorando papeles poco convencionales. Su último estreno, la serie ‘The Sticky’, producida por Amazon, se adentra en una comedia criminal inspirada en un robo real de jarabe de arce -sí, has leído bien- en Canadá.
Aunque no hay ningún proyecto confirmado que vuelva a unir a ambas intérpretes frente a la cámara, su amistad parece mantenerse firme. Ya te dijimos que era una historia alejada de las peleas habituales de Hollywood.