
Lewis Hamilton vivió una jornada para el olvido en la clasificación del Gran Premio de Hungría, donde quedó fuera en la Q2 y se ubicó en la duodécima posición, mientras su compañero en Ferrari, Charles Leclerc, se llevó la pole position. El siete veces campeón del mundo no ocultó su frustración y se mostró sumamente autocrítico.
“Soy un completo inútil. El equipo no tiene ningún problema, ya vieron que el coche está en la pole. Quizás lo que necesitan es cambiar de piloto”, expresó Hamilton con evidente decepción, reconociendo que estuvo «muy lejos del ritmo». Ante los medios de F1 TV, añadió: “Piloté fatal; es lo que hay”.
Esta eliminación en Hungaroring se suma a su reciente salida en la Q1 del Gran Premio de Bélgica, aunque en esa ocasión logró remontar y terminó séptimo, llevándose el reconocimiento de Piloto del Día. Aun así, las sensaciones actuales del británico no son positivas, y los contrastes con el rendimiento de Leclerc han encendido las alarmas.
Por su parte, Charles Leclerc dio la sorpresa al conquistar la pole con un tiempo de 1:15.372, superando por mínimas diferencias a los McLaren de Oscar Piastri (a 26 milésimas) y Lando Norris (a 41 milésimas), quienes partían como favoritos.
Las condiciones del circuito, con temperaturas más bajas y viento racheado, afectaron el rendimiento de los McLaren, que venían dominando desde las prácticas del viernes. El monegasco, sin embargo, aprovechó el momento y saldrá este domingo desde la primera posición, en busca de un triunfo que podría cambiar el rumbo del campeonato.
La carrera en el trazado de Hungaroring está programada para las 15:00 horas locales (13:00 GMT).