
Guillermo Ochoa enfrenta una de las pruebas más complicadas de su carrera en Europa. El veterano arquero mexicano y su equipo, el AVS Futebol SAD, están al borde del abismo en la Primeira Liga de Portugal y necesitan una combinación casi perfecta de resultados para evitar un nuevo descenso, el que sería el cuarto en la trayectoria del guardameta en el Viejo Continente.
Luego de 33 jornadas, el AVS ocupa la antepenúltima posición con 27 puntos. Esto los coloca en zona de repechaje por la permanencia, donde deberían disputar un Play-off ante el tercer lugar de la Segunda División para intentar conservar su lugar en la máxima categoría. No obstante, su destino no está completamente en sus manos.
Para aspirar a una salvación directa, el AVS está obligado a derrotar a Moreirense en su último compromiso, pero además necesita que Estrela Amadora —ubicado un lugar arriba con 30 puntos— no sume en su duelo ante Estoril. Es decir, los de Ochoa deben ganar y esperar que Estrela empate o pierda. De no darse esta combinación, los de Vila das Aves tendrían que jugarse la permanencia en el repechaje.
Pero el panorama podría ser aún más sombrío. Si AVS empata o pierde, y el Farense (que también pelea por no descender) suma al menos un punto, el equipo de Ochoa caería directamente a la Segunda División, sin siquiera oportunidad de disputar el Play-off.
Cuarto descenso para Ochoa en Europa
De consumarse el descenso, sería la cuarta vez que Guillermo Ochoa lo vive en Europa. El primero fue en 2011 con el Ajaccio de Francia; después con el Granada de España en 2017; y más recientemente con el Salernitana de Italia en la temporada 2023-24. A pesar de su experiencia y sus destacadas actuaciones individuales, la mala fortuna ha acompañado al arquero mexicano en varios de sus pasos por clubes europeos.
Ahora, con un solo partido restante, Ochoa y el AVS Futebol SAD necesitan más que un buen rendimiento: requieren de un milagro futbolístico para mantenerse con vida en la élite portuguesa.