Redacción
La Plaza México anunció la suspensión de las corridas de toros, tras la reforma que prohíbe espectáculos taurinos que impliquen sufrimiento o la muerte del animal avalada por el Congreso capitalino y que entró en vigor el 25 de marzo pasado.
Los administradores de la “Monumental” Plaza de Toros, calificaron la reforma como una “prohibición disfrazada”, al argumentar que elimina elementos esenciales de la tauromaquia y hace inviable la realización de espectáculos taurinos bajo el concepto de “espectáculo sin violencia”.
Además, la Plaza México cuestionó el argumento de protección animal, al asegurar que “la desaparición de las corridas tendrá como consecuencia la extinción del toro de lidia”, especie cuya existencia, dijeron, depende exclusivamente de esta práctica.
Lamentamos profundamente cualquier medida que atente contra la libertad cultural de cientos de miles de personas que han hecho de la tauromaquia una tradición viva en la Ciudad de México y en el resto del país”, se puede leer en el comunicado.
Amparo del matador Joselito Adame
Pese a la determinación de los operadores de la Plaza México de suspender las corridas de toros, y con ello, la próxima temporada que arrancaría en septiembre, aún sigue pendiente la resolución de un amparo promovido por el matador Joselito Adame, con el que pretende impugnar la constitucionalidad de las reformas a la Ley de Espectáculos Públicos y a la Ley de Protección y Bienestar Animal.
El recurso legal fue admitido a trámite por el Poder Judicial de la Federación el pasado 9 de abril, como publicó Excélsior.
César Cantoral, abogado del torero, dijo a este diario que lo que se reclama “es la afectación a derechos individuales como la libertad de trabajo, de comercio y los derechos laborales adquiridos por Adame durante sus múltiples presentaciones en la Plaza México”.
Se prevé que la resolución sobre este amparo se emita en septiembre próximo.
