
Redacción
El matador de toros Emilio Macías, se encuentra, dentro de lo serio de la cornada que sufrió, estable. Su vida, en este momento, no corre peligro pese a los destrozos que sufrió en la zona rectal, uno de los glúteos que prácticamente destrozó el pitón del toro, y fuertes golpes en el fémur y otras partes de su organismo.
‘Fue muy dura la cornada. No sé cuánto tiempo pasó en el pitón del toro, ahí colgado, no lo quería soltar y los médicos dicen que hay muchos destrozos en su organismo, aunque ninguno que ponga en peligro su vida en este momento. Él está consciente, le dolió muchísimo la cornada. Fue su bautizo de sangre, lleva cinco años de matador de toros y nunca había sufrido una herida. Ha sido muy fuerte y valiente, y los médicos nos han pedido esperar a que pasen las 72 horas de rigor para dar a conocer su real parte médico’, contó su hermano, el también matador de toros José María Macías.
Emilio sufrió una grave cornada el pasado sábado en la plaza de Tlaxcala, cuando un toro, de la ganadería de Enrique Fraga, lo prendió por la zona rectal justo cuando entraba a matar.