Redacción
Humberto “Chupete” Suazo, uno de los máximos ídolos en la historia del Club de Futbol Monterrey, anunció oficialmente su retiro de las canchas, poniendo fin a una carrera legendaria que marcó una era en el futbol mexicano y, especialmente, en la institución albiazul.
El retiro definitivo
Tras cuatro meses sin acción, la noche de este lunes, Humberto Suazo volvió a las canchas en el empate sin goles frente a Recoleta y declaró que su momento de colgar los botines está muy cerca, pues apuntó que será el 24 de octubre.
«Mi idea es retirarme en cancha, estar bien para mi último partido acá, despedirme con mi gente frente a (Deportes) Copiapó… La decisión está tomada, he jugado más de la cuenta», declaró a la cadena chilena TNT Sports.
El atacante chileno, recordado por su carácter, liderazgo y goles decisivos, fue durante varios años el máximo goleador histórico de Rayados con 121 anotaciones, cifra que lo mantuvo en la cima hasta que Rogelio Funes Mori lo superó en 2021. Suazo no sólo dejó goles, sino títulos, recuerdos imborrables y una conexión inquebrantable con la afición regiomontana.
La historia con Rayados
Su historia con Monterrey comenzó en 2007, cuando llegó procedente del Colo-Colo de Chile. Desde su primer torneo demostró su calidad y personalidad dentro de la cancha, convirtiéndose rápidamente en el referente ofensivo del equipo.
Con los albiazules conquistó dos títulos de Liga MX (Apertura 2009 y Apertura 2010) y fue pieza clave en la histórica etapa de dominio internacional del club, levantando la Liga de Campeones de la Concacaf en 2011, 2012 y 2013, torneos que abrieron las puertas a participaciones destacadas en el Mundial de Clubes.
En el plano individual, Suazo fue campeón de goleo del Clausura 2008 y protagonista en las finales más memorables del club. En el Apertura 2009 fue figura decisiva ante Cruz Azul, y un año después repitió la hazaña con doblete en la final ante Santos Laguna.
Su capacidad para aparecer en los momentos más importantes lo consolidó como uno de los delanteros más determinantes que haya vestido la camiseta rayada.
A una década de su despedida del Monterrey, Suazo deja un legado imborrable. Su número 26 quedó grabado en la memoria del club y de toda una generación de aficionados que lo vieron comandar una de las etapas más gloriosas de Rayados.
El “Chupete” se retira, pero su nombre quedará para siempre entre los más grandes en la historia del Monterrey.
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