Redacción
Armand Duplantis es toda una leyenda del salto de pértiga. Lleva teniendo el récord del mundo desde febrero de 2020, cuando le quitó la marca al francés Renaud Lavillenie en Polonia por un centímetro, de 6,16 a 6,17 metros. Desde entonces, ha batido su propio registro 13 veces más, en un periodo de cinco años.
Su última marca fue en el Campeonato Mundial de Atletismo celebrado en el Estadio Olímpico de Tokio. Allí puso el listón en 6,30 metros de altura. Para homenajear a su atleta, la localidad sueca de Avesta tiene colocado una instalación de salto de pértiga que van subiendo centímetro a centímetro cada vez que Duplantis bate un nuevo récord. El sueco intenta acudir a este acto para ser él mismo el que cambia la barra. Este monumento se encuentra al lado del Caballo de Dalecarlia más alto del mundo, de 13 metros.
El deportista de 25 años subió junto a un operario a subir el listón hasta los 6,30 metros de altura. En un elevador aéreo y con arnés de seguridad, Mondo reveló: «De hecho, le tengo un poco de miedo a las alturas cuando no hay una colchoneta debajo».
En Avesta, localidad sueca de 15.000 habitantes, se encuentra la casa del club IK Stal, donde su abuelo estuvo activo hasta los 82 años, siendo presidente 25 años, y su tía también ejerció ese cargo durante 13.
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