Redacción
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Además de enfrentar a los Houston Texans y posiblemente las burlas de los fans contrarios, Deshaun Watson tal vez deba enfrentar un oponente menos visible en su primer partido de la temporada regular de la NFL en casi dos años.
Los 700 días de oxidación Watson tendrá su esperado debut con los Cleveland Browns tras purgar una suspensión de 11 meses por denuncias de abuso sexual, y se verá hasta qué punto lo afectará el largo descanso.
Su último partido de temporada regular fue el 3 de junio de 2021, antes de que colapsara su relación con el equipo que lo contrató, antes de que exigiera a los Texans que le dieran el pase y antes de que una veintena de mujeres lo acusaran de conducta obscena durante los masajes. Ha rechazado las acusaciones y arreglado las demandas.
En su último partido, Watson pasó para 365 yardas y tres touchdowns para Houston, que perdió 41-38 con Tennessee. Desde entonces habrá pasado toda una vida para el quarterback de 27 años, quien ha reconocido que no está seguro de qué sucederá. “Honestamente, tendremos que verlo el domingo”, dijo Watson esta semana. “Puede tomar tiempo o no tomar tiempo”.