
Redacción
Los clavadistas mexicanos Kevin Berlín y Randal Willars vivieron un debut muy emotivo en los Juegos Olímpicos de París 2024, al quedar a solo 3.49 puntos de la medalla de bronce en la prueba de plataforma de 10 metros sincronizados. Este estrecho margen dejó a los atletas, especialmente a Berlín, profundamente frustrados; el veracruzano se dejó llevar por la emoción y rompió en llanto tras la competencia.
«El deporte te da lo mejor y, a veces, también más lecciones. Hoy me tocó aprender, seguir adelante y seguir luchando», expresó Berlín en los pasillos del centro acuático. El clavadista fue autocrítico respecto a su desempeño, señalando que falló en el cuarto clavado y que en el quinto no logró ajustar algunos detalles. «Mi entrenador y yo revisamos la pantalla y no sentimos que esa fuera nuestra calificación, pero al final, los jueces son los que deciden», comentó el campeón panamericano.
En su segunda participación en unos Juegos Olímpicos, Berlín se mostró más maduro a pesar de la decepción. «Di lo mejor en cada clavado, luché hasta el final, pero nos quedamos a tres puntos», indicó. Lamentó no haber podido alcanzar la medalla que parecía al alcance y deseó haber brindado una alegría a México.
Kevin Berlín volverá a la fosa de clavados el 9 de agosto para su prueba individual, en la que promete darlo todo. «Hay que seguir perseverando, el que persevera alcanza. Demostraré que en momentos difíciles hemos estado aquí. Así es el deporte, al final somos los mejores del mundo», concluyó.