
Redacción
Carlos Alcaraz sobrevivió a una dura prueba en el Abierto de Madrid. Rafael Nadal no puede decir lo mismo, y ha concluido quizá su última aparición en este torneo en casa.
Después de dos cómodas victorias, Alcaraz tuvo que emplearse a fondo. El vigente bicampeón, que se presentó en la capital española tras padecer una dolencia en el antebrazo derecho, se exigió casi tres horas para vencer 6-3, 6-7 (5), 7-6 (4) al alemán Jan-Lennard Struff, 24to cabeza de serie, en la reedición de la final del año pasado.
Nadal, quien ostenta un récord con cinco campeonatos en la capital española, tuvo dificultades de principio a fin y sucumbió por 7-5, 6-4 ante el checo Niri Lehecka (31ro).
Los dos españoles venían de lesiones y buscan ponerse en forma para el Abierto de Francia que se realizará el mes próximo.
Alcaraz, de 20 años, se había perdido los torneos en Montecarlo y Barcelona. Nadal, de 37, había disputado dos partidos en Barcelona tras no jugar duelos competitivos en casi tres meses.
Veintidós veces monarca de torneos del Grand Slam, Nadal llegó a Madrid reconociendo que no estaba en su mejor forma y se mostró preocupado por su condición. Al final, se conformó con haber ganado tres duelos consecutivos sin mostrar limitaciones físicas significativas.
Tuvo apenas una oportunidad de quiebre ante Lehecka, un tenista que se caracteriza por su buen saque y quien ha ganado sus tres partidos del certamen en sets corridos.
Segundo preclasificado en la cita Masters 1000, Alcaraz dejó escapar cuatro puntos de partido con el marcador 5-3. Pero aprovechó su primera ocasión para sellar el pase a los cuartos de final en el desempate decisivo en la arcilla de la Caja Mágica.
“Ha sido increíble poder jugar este nivel durante tres horas después de un mes sin competición”, señaló el astro español. “Eso ha causado los altibajos que he tenido, pero esto es el tenis y hay que lidiar con estas cosas.
Alcaraz intenta convertirse convertirse en el primer jugador que conquista tres veces seguidas en el Abierto de Madrid. También tuvo que irse al máximo de tres sets para doblegar a Struff en la final del año pasado. Su rival de turno será Andrey Rublev.
También el martes, el máximo cabeza de serie Jannick Sinner dejó atrás las dudas por una molestia en cadera y derrotó a 5-7, 6-3, 6-3. El italiano Sinner es la única raqueta que este año ha alcanzado la ronda de cuartos en todas las cuatro citas Masters 1000 este temporada.