Redacción
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Los Bills y sus seguidores rindieron varios homenajes a Damar Hamlin el domingo. Abundaron los jerseys con el número 3 y los mensajes escritos en camisetas. Incluso, los aficionados firmaron una tarjeta de tres metros (10 pies) de ancho, en la que deseaban la pronta recuperación del safety.
Pero no estaba en el libreto lo que ocurrió cuando los Bills volvieron a jugar. En la primera acción de Buffalo desde el lunes, cuando Hamlin sufrió un paro cardiaco en pleno partido, Nyheim Hines atrapó la patada de salida y devolvió el balón 96 yardas, hasta la zona de anotación, ante los New England Patriots.
El touchdown levantó los ánimos del público en lo que era ya una jornada de catarsis en Buffalo. Las muestras de apoyo expresadas durante casi una semana a Hamlin continuaron en el partido que marcó el regreso de los Bills por primera vez desde que Hamlin recibió resucitación cardiopulmonar en el terreno, tras realizar un derribo en el primer cuarto de un partido en Cincinnati.
Desde entonces, Hamlin ha tenido lo que según los médicos es una recuperación notable. Una simple tarjeta comprada en una tienda no era suficiente para el aficionado de los Bills, Ryan Magnuson, en su deseo de mostrar su apoyo a Hamlin.
Magnuson, propietario de una tienda de letreros, fue más allá al diseñar una tarjeta de lienzo de 4 por 10 pies (1,2 por 3 metros) que montó cerca de la entrada del estadio de los Bills para que todos la vieran y firmaran antes del partido de Buffalo ante los Patriots.
“Ha sido algo muy positivo. Se han acercado aficionados de los Bills, de los Patriots y personas vistiendo camisetas de otros equipos de la NFL. Creo que en este momento esto es más grande que una cuestión de un solo equipo”, dijo Magnuson. “Esto es para Damar”.
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