El Liverpool se impuso al Real Madrid gracias a un gol decisivo de Alexis Mac Allister, quien aprovechó una desatención defensiva para sentenciar a un equipo merengue que lució sin ideas y lejos de su mejor versión. Los dirigidos por Jürgen Klopp dominaron gran parte del encuentro, controlando el ritmo del juego y evitando que los de Carlo Ancelotti reaccionaran.
El conjunto blanco mostró un desempeño apagado, con pocas llegadas de peligro y una falta de conexión en el mediocampo, mientras que el Liverpool aprovechó cada espacio para generar oportunidades. Mac Allister fue la figura del partido, no solo por el gol, sino también por su trabajo constante en la recuperación y distribución del balón.
En otro encuentro de la jornada, el Atlético de Madrid sufrió más de lo esperado, pero logró quedarse con la victoria en los minutos finales, manteniéndose entre los primeros puestos de la clasificación.
