
Redacción
LeBron James está a punto de agrandar aún más su legado en la NBA, ya que la próxima temporada será la número 23 de su carrera profesional, algo que ningún otro jugador ha logrado a sus casi 41 años. El futuro miembro del Salón de la Fama ha roto múltiples récords individuales a lo largo de su ilustre trayectoria, lo que lo coloca —dependiendo de a quién se le pregunte— entre los tres mejores jugadores de la historia.
Dos ex compañeros hablan sobre el legado de LeBron James
Jugar junto a LeBron James no es para cualquiera, y eso lo dejaron claro dos de sus ex compañeros en los Cleveland Cavaliers, Richard Jefferson y Channing Frye, durante un reciente episodio del podcast ‘Road Trippin’. Jefferson, ahora analista en transmisiones de la NBA, habló en un tono sincero y sin resentimientos sobre cómo es LeBron en el día a día y por qué ha llegado tan lejos, incluso con el paso de los años.
“Jugar con LeBron apesta… Apesta porque estás intentando ganar un campeonato. Apesta porque cada día hay una presión constante. Apesta porque si tú llegas al gimnasio a las 8, LeBron ya estuvo ahí desde las 6:30. Está viendo vídeos, está haciendo trabajo extra. Luego cometes un error y él te grita ‘¿qué demonios estás haciendo?’… Esa es la parte que no se ve”, comentó.
Según Jefferson, el nivel de exigencia de LeBron obliga a sus compañeros a mantenerse siempre a la altura, algo que no todos están preparados para asumir. Una opinión que también ha sido compartida por su actual compañero en los Lakers, Austin Reaves, quien ha señalado en varias ocasiones que LeBron es casi siempre el primero en llegar los días de partido, marcando el estándar para el resto del equipo.
“Cuando juegas con él, no puedes esconderte. Vas a quedar expuesto si no haces tu trabajo. Tienes que estar completamente comprometido con ganar. Si no, simplemente no encajas”, agregó Richard Jefferson.
Por su parte, Channing Frye, quien también compartió vestidor con LeBron en esa etapa histórica en Cleveland, coincidió en que el nivel de intensidad puede ser abrumador para algunos jugadores:
“No es que sea malo jugar con LeBron, pero tienes que entender que no se trata de ti. Él es el motor del equipo. Él lidera todo. Y si eso hiere tu ego o no estás listo para ese tipo de presión, lo vas a pasar mal”, comentó el ex jugador de los Cleveland Cavaliers.