
Redacción
Durante 2024, cuatro de cada diez personas que ingresaron de forma irregular a México consideraron al país su destino final, destacó la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).
En el marco del Día Mundial de las Personas Refugiadas, Acnur encuestó a más de 14 mil personas que ingresaron de forma irregular a territorio mexicano, de las cuales, 41 por ciento señaló que México era su destino final, frente al 26 por ciento registrado en 2023.
En el reporte del monitoreo de protección en México 2024 “Tendencias y desafíos del desplazamiento forzado en México”, realizado en 19 ciudades, informó que por primera vez, las mujeres representaron la mayoría de la población encuestada, con 55 por ciento del total, mientras que los hombres constituyeron 45 por ciento.
Detalló la agencia de Naciones Unidas que, 55 por ciento de las personas viajaban en grupo familiar y 45 por ciento lo hacía de forma individual. “Un tercio de la población encuestada eran niñas, niños o adolescentes, lo que indica un desplazamiento más amplio de núcleos familiares completos”.
Al respecto, el 53 por ciento mencionó haber salido de su país luego de haber sido víctima directa de violencia, amenazas o intimidación; 43 por ciento expresó temor ante la situación general de inseguridad y 37 por ciento señaló falta de empleo o bajos ingresos como motivo principal. “Estas cifras son consistentes con las de 2023, lo que confirma la persistencia del desplazamiento forzado en la región”.
El 76 por ciento de las personas encuestadas afirmó que enfrentaría un riesgo significativo si regresara a su país de origen. “Este dato sugiere que una proporción considerable podría ser reconocida como refugiada bajo el sistema de asilo mexicano”.
En contexto, Acnur documentó que 42 por ciento de la población encuestada sufrió algún incidente de seguridad antes de llegar a México, porcentaje que subió a 58 por ciento en 2024. Añadió que a nivel nacional, 40 por ciento de las personas refugiadas y migrantes encuestadas reportó haber sufrido algún incidente.
De acuerdo al informe, el 83 por ciento de la población encuestada no contaba con ningún tipo de documentación emitida por autoridades mexicanas, frente al 31 por ciento registrado en 2023. “La falta de documentación limita el acceso a derechos y servicios básicos y subraya la necesidad de fortalecer los mecanismos de regularización y protección”.
Tras lo anterior, la Agencia señaló que los hallazgos refuerzan la necesidad de contar con una política de asilo sólida y de largo plazo, que garantice protección desde el momento de la llegada hasta la integración efectiva de las personas refugiadas en las comunidades de acogida.
“En un contexto de recursos limitados, es fundamental seguir financiando estos esfuerzos de monitoreo, que permiten orientar políticas públicas, identificar necesidades de protección y garantizar respuestas basadas en evidencia”, enfatizó.