
Redacción
El reciente informe Perspectivas del acero 2025 de la OCDE revela que la incursión de China en el mercado mundial del acero, mediante enormes subsidios a sus productores, ha provocado una alteración en la producción y la pérdida de más de 113 mil puestos de trabajo en los últimos ocho años.
Además, señala que el desequilibrio actual amenaza los esfuerzos en materia de descarbonización. En este sentido, se espera que el 40 por ciento de las nuevas capacidades previstas entre 2025 y 2027 se basen en procesos de alto horno/horno básico de oxígeno, altamente emisivos, lo que afectaría negativamente las inversiones en tecnologías bajas en carbono.
El informe advierte que el exceso de capacidad alcanzaría los 721 millones de toneladas métricas (mmt) para 2027, superando en unos 290 mmt la producción conjunta de acero de los países de la OCDE en 2024.
“Este incremento se debe a la continua expansión de la capacidad, que contrasta con el débil crecimiento de la demanda mundial de acero. El elevado volumen de subvenciones y otras políticas que distorsionan el mercado en varias economías no pertenecientes a la OCDE son factores clave de este desequilibrio”, señala el documento.
Refiere que las exportaciones chinas de acero han aumentado hasta alcanzar un nivel récord de 118 millones de toneladas en 2024, más del doble que en 2020. Este repunte ha desestabilizado los mercados siderúrgicos de las economías de la OCDE, provocando que las medidas antidumping se hayan quintuplicado desde 2023.
Señala también que esta situación ejerce una presión considerable sobre las empresas siderúrgicas de los países de la OCDE, que han visto caer su rentabilidad hasta mínimos históricos.
Al respecto, Mathias Cormann, secretario general de la OCDE, advirtió: “Las conclusiones del informe OECD Steel Outlook 2025 evidencian la urgente necesidad de abordar el creciente exceso de capacidad para asegurar el buen funcionamiento de los mercados siderúrgicos mundiales”.