Aunque los números muestran que esta temporada podría considerarse una era dorada para los pateadores en la NFL, la percepción es distinta para los aficionados de Baltimore, Filadelfia y Cincinnati. Si bien el 84.9% de los intentos de gol de campo han sido exitosos —cercano al récord del 85.9% del año pasado—, las fallas recientes de algunas figuras destacadas generan preocupación.
Pateadores como Justin Tucker, Jake Elliott y Evan McPherson, considerados entre los más confiables de la liga, enfrentan una racha negativa que amenaza con desestabilizar a sus equipos. Tucker, cinco veces All-Pro y reconocido como uno de los mejores de la historia, ya ha fallado seis goles de campo esta temporada. Aunque logró un gol de 56 yardas clave contra Cincinnati, también erró un punto extra que complicó un partido contra los Bengals.
McPherson, que sorprendió en 2021 al ser casi infalible, ha perdido consistencia en 2024. Su desempeño reciente incluyó fallos consecutivos desde 48 y 51 yardas en un partido contra los Chargers, lo que resultó en una derrota para los Bengals. En el mismo enfrentamiento con Baltimore, no logró concretar un intento de 53 yardas que habría significado la victoria.
En el caso de Jake Elliott, su situación preocupa menos dado que los Eagles encadenan seis victorias consecutivas. Sin embargo, sus errores recientes —dos goles de campo y un punto extra fallados ante Washington— han encendido las alarmas en Filadelfia. Este año, Elliott acumula cinco intentos fallidos, mientras que McPherson y Dustin Hopkins registran seis cada uno.
Aunque todavía queda tiempo para que los pateadores recuperen su nivel, el margen de error es estrecho para equipos como los Ravens y los Eagles, que tienen expectativas altas de llegar a los playoffs. Un desempeño inconsistente podría costarles caro en los momentos más críticos de la temporada.