Redacción
Othoniel Arce, que fuera parte de una de las épocas más exitosas del Monterrey durante los primeros años de la década pasada, emigró al futbol de Bolivia en el verano para incorporarse al Blooming, uno de los equipos más importantes del país sudamericano.
¿Regresaría Othoniel Arce al futbol mexicano?
Othoniel Arce, platicó con ‘Récord’ y se sinceró sobre un posible regreso al futbol mexicano, mismo que descartó debido al ‘poco’ sueldo ofrecido sumado a que se encuentra en la etapa final de su carrera.
“Me hubiese encantado, pero hay que ser realistas, yo estoy por terminar mi carrera. De hecho, lo llegué a pensar el semestre pasado, me encantaría pero no es fácil. Hoy regresar a la Liga de Expansión es complicado; los salarios son muy bajos, hablo de bajos por el tema de futbol, hay chavos que cobran 20 mil pesos”.
¿Cómo llegó Othoniel Arce al futbol boliviano?
Si bien, Othoniel Arce ya había participado en otra liga sudamericana como lo es la peruana, en la que jugó con el Melgar y Ayacucho entre el 2020 y 2022. Sin embargo, la manera en la que llegó al Blooming fue gracias a un entrenador que tuvo en México, como lo es el argentino Carlos Bustos, con quien estuvo en San Luis y le ofreció un espacio en el equipo de la Academia.
“Bustos me dio la oportunidad de ir a Sudamérica. Blooming es un equipo grande en Bolivia, se hizo la conexión, me habló y me dijo que si quería venir, y por supuesto le dije que acepté” comentó.
Bustos como entrenador en México ganó la Copa MX en el Apertura 2013 con el extinto Monarcas Morelia al derrotar al Atlas por penales en el Estadio Morelos.
¿Qué diferencias ha notado Arce con el fútbol mexicano y el sudamericano?
Othoniel Arce ganó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011, además de una Concachampions con Rayados en 2012, habló de las condiciones atípicas para jugar futbol que existen en Bolivia, además de señalar que es igual de pasional que el mexicano al representar a Blooming.
“El futbol sudamericano se vive distinto que en México, pues aunque en nuestro país es igual de pasional, la complejidad de jugar en altitudes extremas en Bolivia lo hacen un deporte diferente, acá juegas a alturas de 4 mil metros y hay equipos que se hacen fuertes de locales. El equipo donde yo juego no es de altura, se juega como se dice en el llano, adaptándome a todos esos factores. Estoy contento de estar por acá”.