
Redacción
Los UConn Huskies conquistaron este domingo su segundo título consecutivo en la March Madness de la NCAA tras ganar con autoridad por 75-60 la Final de Glendale (Arizona) contra los Purdue Boilermakers. UConn celebró el sexto título NCAA de su historia, en otras tantas Finales, y se convirtió en la primera universidad capaz de lograr el doblete desde que lo hiciera Florida en 2007 contra UCLA y 2008 contra Ohio State.
En un duelo entre los dos primeros cabezas de serie, el equipo de Dan Hurley estuvo liderado por 20 puntos de Tristen Newton y quince de Stephon Castle. Acabó el torneo con un más 140 en diferencia de puntos, un récord en el baloncesto universitario estadounidense.
En Purdue, el estelar pívot Zach Edey fue el líder anotador con un doble doble de 37 puntos y diez rebotes que no tuvo premio. El potente pívot metió 37 de los 60 puntos de su equipo, que tan solo conectó un tiro de tres puntos en siete intentos.
Fue una Final marcada por el equilibrio en la primera mitad, con muchos cambios de líder en el luminoso y los dos pívots, Edey y Clingan, como referentes ofensivos de sus equipos. Purdue solo lanzó dos veces desde la línea de tres puntos en la primera mitad, mientras que UConn lo hizo nueve veces conectando tres.
Edey metió once puntos y junto a Smith (9) anotaron 25 de los 30 puntos de Purdue en la primera mitad; en UConn, Clingan metió siete y capturó dos rebotes. Hasta 18 de los 30 puntos de Purdue fueron anotados en la pintura, mientras que UConn metió 20 de sus 36 en esa zona de la cancha.
Pisó el acelerador UConn en la segunda mitad y Purdue no logró aguantar ese ritmo. Siguió encomendándose al poderío físico de Edey, pero solo conectó cuatro de sus primeros 14 tiros de campo y Connecticut lo aprovechó para escaparse y tomar 17 puntos de ventaja en el 59-42.
Edey siguió siendo el único referente ofensivo de Purdue y la ventaja de UConn tocó los 18 puntos con una canasta de Spencer que convirtió en poco más de una formalidad los últimos cinco minutos.
Final Femenil
En categoría femenil, la March Madness fue ganada por South Carolina contra Iowa de la estrella Caitlin Clark, la gran figura del baloncesto universitario estadounidense en este momento. South Carolina ganó su segundo título en tres años y dejó sin corona a Clark, en el último partido de su carrera a nivel de ‘college’.
La estelar jugadora de Iowa, una prodigio ofensivo y del tiro de tres puntos llamada a marcar un antes y un después en el baloncesto femenil estadounidense, será con toda probabilidad la primera elección absoluta, propiedad de las Indiana Fever, en el próximo draft de la WNBA.